En la actualidad se puede evidenciar los cambios a gran
escala en todos los ámbitos sociales. La educación no es la excepción, tomando
en cuenta que los estudiantes necesitan prepararse con base a su contexto a la
cual se enfrentan en el presente y se enfrentaran en el futuro.
En este contexto, el papel del docente juega un papel
fundamental a la hora de preparar sus actividades de enseñanza, las cuales deberán
ser, utilizando estrategias que faciliten el proceso de recepción de la información
de manera eficiente.
Este blog presenta dos importantes estrategias como son la PRÁCTICA
DISTRIBUIDA E INTERCALADA las cuales aportan son muy útiles para lograr un
aprendizaje a largo plazo.
Es una técnica de enseñanza que tiene por objetivo programar
las sesiones de estudio de un tema en particular en prácticas relativamente
cortas las cuales están espaciadas en el tiempo.
Normalmente en un salón de clases, una gran cantidad de
docentes utilizan la práctica masiva por ser una técnica tradicional que de
alguna u otra forma a dado resultado en la aplicación de las evaluaciones
frente a una evaluación, pero la interrogante es: ¿el aprendizaje está
realmente adquirido en la memoria a largo plazo?. En muchas ocasiones los
estudiantes obtienen excelente notas al aplicar una evaluación luego de aplicar
la técnica masiva, pero al pasar un lapso de 4 semanas, y se vuelve aplicar una
evaluación similar del mismo tema, el resultado baja significativamente
(Carpenter & Agarwal, 2019)
El método de enseñanza – aprendizaje masivo y distribuido
son prácticamente opuestos el uno del otro. La práctica masiva en el contexto
educativo, es simplemente una sola sesión de práctica en la que es utilizada
repetidamente la misma habilidad o conocimiento de forma aislada. Esta práctica
está relacionada con la actividad pedagógica que el docente realiza en una hora
clase, es decir cuando trata un tema que los estudiantes necesitan aprender.
Otro ejemplo puede ser cuando el docente envía una actividad de tarea para casa
cuando se enseñó un tema en clase y que los estudiantes hayan demostrado que
hayan dominado el mismo. En caso de que el tema tratado no hay culminado en la
hora pedagógica, el docente suele asignar una segunda sesión de practica
masiva, y esta se completara con poco o ningún tiempo entre ella y la sesión
anterior. En resumen, la practica masiva proporciona utiliza una o dos sesiones
como mínimo de practica poco después de una instrucción inicial de la habilidad
objetivo y luego pasar a la siguiente destreza en la secuencia curricular
(Fernández, 2022).
Práctica intercalada
Podemos ayudar a nuestros estudiantes aún más si coordinamos su
aprendizaje espaciado con intercalado, un enfoque relacionado para
ayudar a nuestros estudiantes a dominar nuevas habilidades. El intercalado se
refiere a la estrategia de aprender y practicar los diferentes componentes de
una habilidad en orden mixto. Si estuviera aprendiendo a jugar a tocar piano,
por ejemplo, o tratando de ejecutar una pieza musical, podría pasar una semana
entera trabajando en una escala musical, otra semana prácticamente los acordes,
y una tercera semana aprendiendo la melodía. Esto sería lo que los
investigadores llaman práctica de bloque. Intercalar,
por el contrario, me haría mezclar mi práctica: un par de días en cada
habilidad, cada semana; o las tres prácticas cada día, durante cinco días. La
investigación sobre intercalado sugiere muy claramente que la segunda opción
tendrá más probabilidades de mejorar mis habilidades a largo plazo.
Así
como con la práctica distribuida/distribuida, existe considerable literatura
que sugiere que es mejor la práctica intercalada que la práctica de bloque. Un
experimento que se cita con frecuencia es en el que a los estudiantes se les
pidió el desafío de aprender a resolver problemas matemáticos que involucraban
diferentes formas geométricas. En este experimento, Rohrer y Taylor (publicado
en 2007) dieron a los estudiantes tutoriales breves sobre cómo calcular el
volumen de cuatro formas geométricas diferentes, incluido ver un ejemplo
resuelto, y luego se les pidió que resolvieran 16 problemas diferentes que
requerían que usen lo aprendido. Las tutorías y las sesiones de resolución de problemas
se realizaron en dos ocasiones separadas, con una semana de diferencia. El
grupo que aprendió en bloque tuvieron un tutorial y luego resolvieron cuatro
problemas; tuvieron un segundo tutorial y luego resolvió cuatro problemas; y
así. El otro grupo que aprendió con intercalación recibió los cuatro tutoriales
a la vez y luego se les dieron los 16 problemas en orden aleatorio. Los que
trabajaron en bloque tuvieron mejor desempeño al principio. Durante la primera
sesión de aprendizaje, por ejemplo, resolvieron correctamente el 89 por ciento
de los problemas. Los que trabajaron con intercalación, resolvieron solo el 60
por ciento de ellos correctamente. Una semana después de completar las sesiones
de práctica, se les dio a los grupos un nuevo conjunto de ocho problemas, en
orden aleatorio, dos sobre cada una de las cuatro formas. La diferencia entre
los grupos fue sorprendente: la tasa de éxito de la práctica en bloque se
redujo al 20%, mientras que la tasa de éxito de la práctica intercalada mejoró
al 63%. Existen más estudios del intercalado en entornos académicos que
confirman su mayor efectividad frente a la práctica de bloque.
Weiner, B. (1985). Una teoría atribucional de la motivación y la emoción del logro.
Revisión psicológica, 92 (4), 548-573.